jueves, 11 de agosto de 2011

Universos o ser

Tu boca como metáfora en un universo,
los labios de un ente aislado.
Desconectada y conectada con lo externo,
con lo que no eres.

Bésame con el mar que llevas sonriente,
con ese mar que no es ningún otro mar,
que a ningún otro se parece.

Tu boca que me quiere, tu lengua,
y aun así solo ellas pueden poseerte.

¿Ves lo sola que has nacido, ajena?
¿Lo ves cuando te entregas y sigues tuya?

Bésame aunque no haya remedio,
y a lo abstracto no accedan nuestros cuerpos.

Bésame despechada, terca e insistentemente.
Es que generas libertades si rechazas detenerte.

Tu boca que es de un ente separado,
que a ti sola pertenece
y que tú sola comprendes.

Bésame que pasando el límite de tus besos
tienes un mundo en el que no penetro
y al que compongo.

Tus ojos que claman eternidades
sólo ellos pueden apreciarlas.
Míralas, que eres la única que las ha visto,
como yo solo tengo lo que mis ojos generan.

Bésalas, que eres la única para amarlas,
como yo solo puedo amar lo que mis besos tocan.

¿Ves, ajena, cómo es que naciendo pariste un mundo?
¿Ves que es sólo tuyo y que eres suya?

Unámonos, ajena, para simbolizar una utopía:
la de deshacernos en la libertad del ideal.

Unámonos, queridísima y ajena,
por el gusto de querer el imposible
a pesar del imposible.

No hay comentarios:

Publicar un comentario